A menudo soñamos con pasar las vacaciones en zonas remotas, lejos de casa. Nos atraen los paisajes majestuosos y la belleza de lo desconocido. Es un pensamiento bastante atractivo, sin embargo, ¡las oportunidades de aventura nos rodean todo el tiempo! Veamos algunas de las ventajas de explorar tu propio vecindario.
La hierba siempre es más verde al otro lado de la valla…
Es un fenómeno común: tendemos a glorificar las oportunidades de otros países, zonas o continentes cuando no estamos realmente familiarizados con nuestro propio entorno. Ya es hora de dejar de creer que no podemos encontrar nada tan digno de nuestro interés en las cercanías. Especialmente cuando se vive en un pueblo pequeño o en las afueras de una ciudad más grande. Dale una oportunidad a tu zona, investiga un poco y descubre las joyas ocultas.
Ahorra algo de dinero
Los viajes tropicales son preciosos, pero suelen ser muy caros. Requieren cierta dedicación para encontrar la manera de reducir los costes y hacerlos asequibles y viables, especialmente cuando eres por ejemplo unx joven estudiante. Es probable que tengas cerca de casa la mayoría de los utensilios necesarios para un viaje, así que quizá ni siquiera necesites gastar dinero en ellos. Los billetes de autobús o tren ofrecen muchos descuentos, sobre todo si tienes la condición de estudiante. Ponte un par de zapatos cómodos y ¡empieza tu aventura!
Descubra la historia de tu región
Cada zona puede tener una historia muy interesante que no se conoce habitualmente. Es probable que puedas encontrar alguna información sobre la historia en Internet o en una biblioteca o museo local. Las zonas que no están cerca de las grandes ciudades suelen pasar desapercibidas cuando se trata de estos temas. Si te gusta aprender sobre acontecimientos históricos, ésta puede ser una oportunidad para pasar un fin de semana fascinante con tus amigxs. Quién sabe, tal vez incluso llegues a saber algo sobre la historia de tus antepasados.
En conclusión, descubrir tu entorno puede ser una experiencia divertida y enriquecedora. Sobre todo si puedes utilizar los recursos creados en el marco del proyecto #DiOtherCity, cofinanciado por el programa Erasmus+ de la Unión Europea. Lo llevan a cabo socios de seis países europeos: Polonia, España, Francia, Bélgica, Chipre e Italia. ¿A qué esperas?